Una de las mayores metas que nos proponemos a lo largo de nuestra vida es la adquisición de una vivienda. Pero todos sabemos lo costoso y financieramente comprometedor que puede llegar a ser. Pues bien, siempre habrá una alternativa para alcanzar ese maravilloso sueño: tener la casa de tus sueños. Para ello puedes recurrir a un préstamo o financiamiento bancario. Te estamos hablando de la hipoteca. Sigue leyendo para que descubras todo lo que necesitas saber sobre este concepto.
Entendiendo el concepto de hipoteca
Comencemos por lo primero: ¿De qué te estamos hablando cuando nos referimos al término “hipoteca”’? Pues bien al hablar de hipoteca nos referimos a un instrumento bancario a través podemos obtener un préstamo por parte del banco, adquiriendo una deuda bajo la figura del aval o la garantía inmueble de cobro.
La hipoteca, préstamo o crédito hipotecario implica que la propiedad que vas a adquirir o cualquier otro bien inmueble que des como garantía de pago queda comprometida a pasar a manos del banco prestamista en caso de impago de la hipoteca.
De este modo el banco se asegura de no perder el préstamo de dinero que te ha concedido con la condición de retener la vivienda de incumplirse el acuerdo financiero. Este instrumento de deuda también puede admitir el compromiso con bienes muebles de alto valor económico.
La financiación para la compra del bien inmueble del deudor queda entonces comprometida y sujeta a la garantía de pago que da derecho al acreedor a retener el bien hipotecado. Liberarse de la deuda y recuperar los derechos sobre la propiedad hipotecada dependerá entonces del cumplimiento de los pagos en deuda adquiridos con el banco.
Términos hipotecarios
Conocer el concepto de hipoteca es la clave para entender este tipo de préstamo. Pero también es necesario identificar otra terminología. Aquí surgen una serie de palabras que es importante definir a fin de manejarnos con conocimiento propio en el área. Aquí te explicamos qué significa cada uno de esos términos. Evitará que no te quedes desconcertado cuando te hablen en este lenguaje.
Deudor
Hace referencia a la persona a quien se le adjudica el préstamo bancario. Cede el derecho temporal sobre la propiedad hipotecada a la entidad bancaria como garantía de pago. Otra manera para definirlo, se le conoce como prestatario.
Acreedor
Dentro del ámbito de las hipotecas, este es el sinónimo de prestamista. Es la entidad que concede el crédito o préstamo financiero. Normalmente es un banco autorizado para el ejercicio del servicio y obligación hipotecaria. Es este quien pone las condiciones del préstamo hipotecario. Y quien último ejecuta la toma de posesión del bien comprometido en garantía en caso de impago.
Aval o deudor solidario
Esta figura funge como garantía adicional solicitada. Pero bajo ciertas condiciones, establecidas por la entidad bancaria prestamista a fin de conceder un financiamiento hipotecario. Se usa de soporte en caso de incumplimiento en el pago del contrato hipotecario.
Se trata de una persona con ingresos suficientes o bienes inmuebles que puedan soportar la deuda. Y tiene participación en el caso de que el deudor contravenga el pago de las cuotas fijadas. Es una figura de respaldo para evitar el incumplimiento de las cuotas con el acreedor.
Porcentaje de financiación
Corresponde al monto por el cual el valor del préstamo será tasado. Dicho de otro modo, el porcentaje del valor del inmueble que será financiado a través del crédito hipotecario. Suele cubrir entre el 70% y hasta el 100% del valor total de la propiedad a adquirir. Se le conoce también como monto máximo.
Plazo
Este término hace referencia al lapso de tiempo establecido por el acreedor para que la deuda sea saldada. Las hipotecas suelen contraerse por períodos de tiempo que van usualmente entre 15 y 40 años. El préstamo se concede a largo plazo.
Intereses
Constituyen el beneficio en dinero que cobra el banco o acreedor sobre el financiamiento otorgado. Según las condiciones de la hipoteca los intereses pueden ser de tipo fijo, variable o mixto.
Interés de mora
Es el importe adicional que cobra el acreedor sobre las cuotas incumplidas de la hipoteca, en caso de pago tardío. De no haberse realizado en la fecha establecida, no implica que el inmueble deba ser retirado. En realidad el deudor pagará un monto extra acorde a un porcentaje establecido en la firma del contrato.
Amortización
Es el pago de una parte del monto total de la hipoteca con el cumplimiento de cada cuota establecida. La amortización se considera anticipada cuando se devuelve parte del préstamo otorgado antes del plazo previsto.
Cargas
Nos referimos a las deudas que se suman sobre la vivienda hipotecada. Sean préstamos anteriores, impuestos pendientes por pagar, compromiso de alquiler u otros gravámenes lícitos.
Comisiones
Los bancos suelen establecer un porcentaje de cobro sobre operaciones de gestión bancaria. Entre los tipos de comisión cobrados encontramos las comisiones de apertura, subrogación, novación e importe por desistimiento. Esto en caso de que se quiera suspender el crédito contratado haciendo devolución anticipada del préstamo.
Hipoteca fija
Este tipo de hipoteca se concede sin cambios en el tipo de interés interpuesto durante el plazo convenido. Durante su vigencia hasta pagar la última cuota, no habrá variación en el monto. En un contrato de este tipo no influye si el valor de los intereses sube o baja.
Hipoteca variable
Se trata de aquellas hipotecas con intereses fluctuantes. Y dependen de la referencia de mercado que se maneje. El valor a pagar cada cuota varía acorde a si el índice a tomar en cuenta sube o baja. Normalmente se proponen como soporte para amortizaciones de plazos muy prolongados.
Hipoteca mixta
Es aquella cuyos intereses a cobro pueden ser de tipo combinado. Es decir, durante los primeros años del plazo de amortización se establece un interés fijo. Pero luego de cumplido un cierto período de amortización se reevaluará el porcentaje de cobro de intereses.
Tasación
Es el cálculo del valor de la vivienda a comprar por la cual se concederá el porcentaje de financiamiento. En función de la tasación se concederá el monto del préstamo hipotecario.
El lenguaje hipotecario suele ser mucho más amplio. Sin embargo, se considera que esta es la terminología adecuada para manejar en toda situación. Con este pequeño glosario de términos ya podrás comprender con claridad el contrato hipotecario que se ejecuta. Y sabrás cual es el más adecuado para ti, según el presupuesto que manejes para la compra de un inmueble.
Lo que debes saber antes de adquirir un préstamo hipotecario
Lo principal antes de comprometerte con una hipoteca es contar con un completo asesoramiento. Pero no siempre contarás con un experto de confianza a quien consultar sobre este instrumento financiero. Puedes hacerte una idea de cómo funciona recurriendo a un simulador de hipoteca en línea. Muchos bancos hoy en día ofrecen una aplicación orientativa en sus portales web para que hagas tu cálculo hipotecario referencial.
Luego es importante que revises algunos aspectos que sin dudas determinarán las condiciones del crédito hipotecario con el cual puedas comprometerte. Asegúrate que conoces bien estos puntos para evitar complicaciones futuras. Así aseguras el cumplimiento de las amortizaciones o la compra del bien inmueble que te planteas:
- Cerciórate de tener bien en claro cuál es el porcentaje de financiación que te será concedido.
- Verifica que estén bien indicados la tasa de interés y el tipo de interés a pagar sobre la hipoteca.
- Comisiones y costos accesorios contemplados por el acreedor para ejecutar la hipoteca.
- El plazo de amortización debe estar claramente señalado, así como la fecha de vencimiento de cada cuota.
- Las posibles penalizaciones por contravenir alguna de las cláusulas del contrato hipotecario. Algunas entidades bancarias podrían estipular ciertas cláusulas de riesgo. Aquí se contempla el pago por anticipado de la amortización total o parcial, suspensión de contrato, reconsideración de intereses u otras estipulaciones.
Recomendaciones antes de someterte a una hipoteca
Optar por una hipoteca es una decisión que se debe tomar con mucha precaución. Son muy pocas las personas que cuentan con el capital para comprar una casa. Por lo que la mejor opción es un préstamo. Asegúrate de hacer una evaluación de las opciones y elige la más conveniente según tu capacidad de pago. Busca una hipoteca que te permita tener cierta holgadez financiera para manejar otros gastos prioritarios.
Evita contraer una hipoteca que te deje en condiciones económicas muy justas. Apenas podrás calificar para el préstamo. A la larga dificultará tu solvencia. Terminarás por cubrir apretadamente con los pagos de las cuotas e intereses comprometidos.
No debilites tu presupuesto con una deuda que te deja al límite con los pagos. Piensa en todas las circunstancias familiares que te podrían contravenir. Recuerda que debes prever cualquier situación. Para las cuales debes estar preparado financieramente.
Evalúa concienzudamente tus ingresos netos luego de las deducciones por impuestos y otros compromisos financieros adquiridos. A esto se deben sumar los gastos regulares y fondos de emergencia. Acomoda tu presupuesto sin afectar tus posibilidades de ahorro y dentro de lo que cabe un préstamo.
Ten en cuenta los costos adicionales que sobrevengan a la compra de la vivienda. Deja espacio de flexibilidad financiera para cubrir gastos de seguro de propiedad, impuestos sobre la vivienda. Así como también la adquisición de un seguro hipotecario privado que reduzca los riesgos de pérdida inmobiliaria.
Haz el cálculo razonable del precio ideal para la compra de tu nueva casa con un experto financiero. Sea tasador de impuestos, un corredor de seguros o el mismo prestamista. Mantente dentro de un rango de compra que te sea cómodo pagar. No solicites una hipoteca si el sitio a habitar requiere demasiadas reparaciones. A la larga los gastos serán mucho mayores.
Preguntas frecuentes
El tema de las hipotecas suele ser un tópico muy delicado. Si bien es una gran ayuda a la hora de adquirir una casa, al no estar bien informado puede convertirse en un problema. Estamos hablando de un préstamo que se paga a largo plazo. Por lo que debes mantener una economía lo más estable posible. Y antes de firmar cualquier contrato, documentarse acerca de todo el procedimiento. Lo mejor es acudir a un profesional en el área para aclarar toda duda.
Pero en algunos casos, esta opción implica pagar por sus servicios. Así que puedes indagar en internet un poco acerca del tema. Existen preguntas claves que debes responder. Estas permitirán que definas si realmente es un paso seguro a tomar. Todos queremos una casa, y no hay que negar que una hipoteca pueda ser una gran aliada.
¿Qué tan difícil es conseguir un préstamo hipotecario?
Las hipotecas suelen situarse en un mercado muy fluctuante. Según el riesgo financiero que muestren las estadísticas en el período en curso, los bancos podrían restringir su capacidad de crédito a fin de evitar la cesación de las hipotecas por impago. Es crucial que puedas demostrar un ingreso neto estable producto de un trabajo fijo. Debes disponer de al menos 35% de esos ingresos mensuales para cumplir con el pago de las cuotas fijadas.
Verifica que estás solvente y listo para comprometerte con un endeudamiento sostenible. Entonces tómate el tiempo para revisar cómo van fluctuando los intereses hipotecarios en el mercado actual. Revisa la oferta y consulta a tu prestamista de confianza.
¿Qué costo mensual me generará una hipoteca?
El monto mensual a pagar por una hipoteca dependerá de las condiciones de la hipoteca que te conceda tu acreedor. Básicamente dependerá el coste mensual del capital inicial. A esto se le suma el tipo de interés fijado, los años de amortización y porcentaje del préstamo ya saldado.
Puedes apoyarte con un simulador de hipoteca en línea. Te permitirá hacer una estimación del importe mensual global a pagar según las condiciones del préstamo que te sea financiado. El cálculo exacto lo hará tu consultor financiero con la entidad acreedora.
Con esta información ya estás listo para empezar tu búsqueda inmobiliaria. Podrás hallar la vivienda de tus sueños y endeudarte con plena confianza con una hipoteca. Es momento de hacer realidad tu sueño de comprar la casa de tus sueños.